Me
internaré en tus profundos silencios.
Sondearé tus prolongadas miradas.
Bucearé
dentro de tu alma, para descubrir si en algún sitio aún resido.
Estoy perdido
aunque en el camino, junto a vos buscadora de destino, estoy tan solo en el
cosmos que creamos, porque tu cuerpo ya no me pertenece.
Espero ansioso me
señales el sendero, ese nuevo que emprendiste sola, soy un peregrino que
necesitado acude al lazarillo que firme lo acompañe.
Perdón, perdón no quiero
que te enfades, lazarillo no es menor que nada, es bastión, es luz y guía firme
para quien como yo, no puede seguir solo.
Espero atento tu señal de : vamos ,
por aquí es el sendero nuevo, estar juntos me devolverá la vida, la verdadera,
la que diseñamos.
Vientos fuertes y oscuras lluvias nos borronearon los
croquis soñados, pero no puedo seguir un sendero que ya está muy desdibujado.
Me internaré en tus profundos silencios, te rogaré que por piedad me mires,
porque ya no tengo registro de que me hayas visto aunque me has mirado.
Estoy
seguro que hay un recuerdo, en tu alma bella de nuestros encuentros, donde el
sol brillaba y ninguna nube amenazaba con quitarnos nada.
Hoy aquí te espero
paciente y ansioso, incoherencia bella que el amor prodiga.
Aquí estoy mirando que párpados sean ventanas que se abran para dejarme verte.
Aquí estoy mirando que párpados sean ventanas que se abran para dejarme verte.
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