No puedo y ya no podré hilvanar mis letras sin cadencias descolgadas. La musa me inspira siempre a canturrear mi mensaje.

Es difícil muy difícil contradecir su susurro.

Por eso me quedo piola haciendo caso acabado.

Pintando con mil colores mancho mis telas ahora, les doy la vida que tienen y las empujo a volar.

Que adornen tu escritorio, que ahuyenten a tus temores, se amiguen a tus recuerdos y que rías como un loco . 

Vergüenzas váyanse fuera, carcajadas vengan todas , celebremos que la vida se nos pasa, no nos pregunta y se escapa.   

13/6/19